sábado, 8 de mayo de 2021

PREMIO CERVANTES 2020

 

Francisco Brines Bañó (Oliva, Valencia, 1932). 

Licenciado en Derecho, Filosofía y Letras Románicas e Historia. Ha compaginado su producción poética con su actividad como profesor universitario. Fue lector de literatura española en la Universidad de Cambridge y profesor de español en la Universidad de Oxford.

© Jesús CíscarSu primer libro, Las brasas, apareció en 1959 y con él ganó el Premio Adonais. Seguidamente publicó Palabras en la oscuridad (1966) que le mereció el galardón con el Premio Nacional de la Crítica. En 1987, recibe el Premio Nacional de Literatura por El otoño de las rosas (1986), uno de sus libros más conocidos y populares, integrado por sesenta poemas escritos a lo largo de diez años. En 1998 recibió el Premio Fastenrath que otorga la Real Academia Española por su obra La última costa (1995), una obra melancólica en la que el poeta recuerda su infancia, desde una orilla apartada, ante la inminencia de un último viaje. En 1999 recibe el Premio Nacional de las Letras Españolas por el conjunto de su obra poética. En abril de 2000 fue elegido miembro de la Real Academia Española de la Lengua y, a partir del 19 de abril de 2001, ocupa el sillón ‘x’ en sustitución del fallecido dramaturgo Antonio Buero Vallejo.

El poeta valenciano fue también investido Doctor “Honoris Causa” en el acto académico de apertura del nuevo curso 2001-2002 de la Universidad Politécnica de Valencia. En abril del 2010, recibió el Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana que reconoce la aportación literaria relevante al patrimonio cultural común de Iberoamérica y España, realizada por un autor vivo. En la final se impuso a candidatos tan ilustres como Carlos Edmundo de Ory, Julia Uceda y María Victoria Atencia.

Brines pertenece a la ‘generación de los cincuenta’, también llamada ‘generación de los niños de la guerra’, en la que figuran los poetas Jaime Gil de Biedma, José Ángel Valente, Carlos Barral, Claudio Rodríguez, José Agustín Goytisolo y los novelistas Rafael Sánchez Ferlosio, Ana María Matute, Carmen Martín Gaite, Luis Martín Santos, García Hortelano y Luis Goytisolo. En 1990 presentó en Oviedo, junto con otros miembros de dicha generación poética, el libro Encuentro con los 50.

La poesía de Brines se caracteriza por el tono hondamente elegíaco de sus versos. Los dos polos entre los que se mueve toda su poesía son, por un lado, el colorido de su tierra natal y el lirismo encendido, y, por otro, los tonos sensitivos y una visión melancólica de la belleza. El tema capital de la poesía de Brines es el paso del tiempo, la decadencia de todo lo vivo, la degradada condición del ser humano sometido a sus limitaciones. El escritor Jaime Siles, miembro del jurado del Premio Reina Sofía, definió al ganador como “un gran poeta metafísico”, alguna de cuyas obras, como El otoño de las rosas (1986), constituye “una de las cimas” de la poesía española de la segunda mitad del siglo XX.

Es el fundador y presidente de la Fundación Francisco Brines, creada en 2019. El objetivo de esta institución es preservar el legado literario y artístico del poeta, así como fomentar el reconocimiento de nuevas voces en el campo de la poesía, a través de los premios anuales: el Premio Francisco Brines, en lengua castellana, y el Premi l'Elca, en catalán.

En noviembre de 2020, Francisco Brines es galardonado con el Premio de Literatura en lengua castellana "Miguel de Cervantes".

PREMIOS LITERARIOS   

2020.- Premio Cervantes.

2019.- Alta Distinción de la Generalitat Valenciana.

2010.- Premio Reina Sofía de Poesía latinoamericana.

2007.- IV Premio de Poesía Federico García Lorca.

2004.- Premio a la Creatividad "Ricardo Marín" (España).

2004.- Premios "Rosalía de Castro".

1999.- Elegido Miembro de la Real Academia Española (sillón X).

1997.- Premio Fastenrath de la Real Academia Española (España), La última costa.

1997.- Premio Nacional de las Letras Españolas (España), al conjunto de su obra.

1987.- Premio Nacional de Poesía (España), El otoño de las rosas.

1967.- Premio de las Letras Valencianas (España), al conjunto de su obra.

1967.- Premio Pablo Iglesias de las Letras (España).

1966.- Premio Nacional de la Crítica (España), Palabras a la oscuridad.

1959.- Premio Adonáis (España), Las brasas.

 

No hay comentarios:

A MI HONORABLE PADRE. 19/05/08

A mi honorable padre.

Me encuentro en una situación difícil, pero cómoda. Es como si flotara en el espacio de los recuerdos. Todo sabe a recuerdos, todo son momentos vividos. Si camino, recuerdo; si pienso recuerdo más intensamente; si tomo cerveza, recuerdo instantes que compartimos; si voy a la compra, él siempre está presente. Todo lo que hay a mi alrededor me recuerda a él. Sueño con su presencia. Fue una persona muy importante en mi vida y para mi vida. Le dije millones de veces que lo quería y eso me reconforta sobremanera. Ahí ando, en estos senderos me encuentro. En alguna ocasión, los lagrimales vierten alguna gota de dolor. Sigo viviéndolo mucho más intensamente que cuando me regalaba su presencia.
Fue un hombre bueno, un buen hombre. Íntegro hasta la exageración. Honesto hasta hacer de la honestidad misma su modo de vivir. Paciente como el mejor chacal que espera el movimiento de su presa para capturarla, él para ayudarla. No tenía palabras de más, las que usaba se llenaban de esperanza y de emoción contenida. Lo quise hasta la profundidad del alma compartida y amiga. Tuve poca comunicación con él en los últimos años porque se apagaba su intelecto y, a la vez, su generosidad de coloso humano.Todo huele a él; todo sabe a él; todo suena a él. A él. A él mismo.

Siempre te recordaré, siempre te querré querido papá.

IN MEMORIAM - Tu hijo Josemari.


A MI MADRE

A MI MUSA

¿Y ahora qué? Ya no estás a mi lado.
Tu presencia se deshace tal el hielo
en fuego, se fija como una obsesión
que me llena y me llega y me yaga
en tremendos nubarrones irónicos
que deshacen amapolas de sueño.
Ese sueño sutil y estremecedor
de tu voz, de tu sonrisa,
de tus tranquilizadoras manos,
alentadoras de sueños.
¡Dímelo al oído cuando estés!
Dime que quieres aunque sea un susurro mío,
un agradable abrazo mío, tal vez
un espontáneo beso mío.
¡Dímelo cuando estés!
Dime que el sueño sueña,
dime que el amor ama,
dime que sin llorar lloras,
dime que no podemos hacer nada, ya
dime que me quieres.
¡Dímelo mamá cuando estés!
Te quiero, quise y querré, a morir, planeta de mis sueños.

LA MISIÓN DE EDUCAR

Educar es lo mismo que ponerle un motor a una barca. Hay que medir, pesar, equilibrar... y poner todo en marcha. Pero para eso uno tiene que llevar en el alma un poco de marino, un poco de pirata, un poco de poeta, y un kilo y medio de de paciencia concentrada. Pero es consolador soñar, que ese inexperto barco mientras uno lo trabaja, irá muy lejos por el agua. Soñar que ese navío llevará nuestra carga de palabras hacia puertos distantes, hasta islas lejanas. Soñar que cuando un día esté durmiendo nuestra propia barca, en barcos nuevos seguirá nuestra bandera enarbolada. Manuela Fernández

PARA MI VIDA, PARA TI.


PARA MI VIDA, PARA TI.

Amor, azucena celestial,
que nada entre espumosas olas,
¿por qué no me dices que me quieres?
¿por qué no colocas tu dulce,
perfume entre caracolas?
Dime amor, huele mi perfume,
ama mi instante, sueña con
tu sombra, con tu recuerdo,
inventa la estrella, ama el infinito
exhala perfumes inquietos
y dormidos silencios de placer.
¿Por qué no me dices que me quieres?
Hambre de mis venas,
Elegíaca amaca,
Luz de mis luces,
Entrada de mis penas,
Novela sin escribir,
Amor de mi vida.
¿Qué quieres que te diga más?
¿Qué? ¿Qué sueñas?

Powered By Blogger